NICARAGUA SE LEVANTA COMO UN FARO PARA EL MUNDO
Managua,
Nicaragua – 11 de abril de 2018
Norelly Learning - Pedro Avilés Z
"Tenemos que hacer que nuestras experiencias en el Templo, sean más personal y significativa"
Con el anuncio de la edificación de un Templo LDS en Nicaragua, debemos
de explorar el propósito del mismo y, los cambios que todos los miembros de la
Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días debemos hacer.
1 Desarrollar más la Fe en Jesucristo y su Expiación
y madurar como miembros misioneros.
2 Mejorar nuestra honradez para con nuestros
semejantes y procurar llevar una vida recta y cargada de servicio: tal como el
Señor lo hizo.
3 Utilizar todas las herramientas de Historia
Familiar, y prepararnos para realizar las Ordenanza redentoras por nuestros
antepasados.
4 Apoyar todos los esfuerzos de los Líderes en ayudar
a cada hermano a lograr su autosuficiencia y depositen su confianza en el
Salvador.
5 Vivan el evangelio y sean familias fuertes cargadas
de amor y dedicación por sus asignaciones o llamamientos.
- “Jesús enseñó: “… estrecha es la puerta y angosto el camino que lleva a la vida, y pocos son los que la hallan” (Mateo 7:13–14).
- “El “camino” que seguimos es Su evangelio y la “puerta” por la que entramos es el bautismo.”
- “El bautismo es la primera ordenanza del Evangelio y un paso necesario en su camino de regreso a Dios”.
Aún falta mucho para ver la “Casa de Santidad del Señor” como un imponente
edificio sagrado, adornado de hermosos jardines y brillante como el sol. No hay
duda, será agradable para Dios y sobre todo para llevar a cabo las ordenanzas
más sagradas.
*Eso significa que debemos de prepararnos para recibir las ordenanzas
del templo. Quizás muchos de nuestra congregación se pregunten, cómo serán las
ceremonias del templo?
Cuando se bautizó, usted hizo un convenio con Dios: prometió tomar sobre
sí el nombre de Jesucristo, recordarle siempre, guardar Sus mandamientos y
servirle hasta el fin. Como miembro de Su Iglesia, usted renueva simbólicamente
su convenio bautismal y todos los demás convenios por medio de la ordenanza de
la Santa Cena.
Las ordenanzas del templo también son sencillas, sagradas y simbólicas.
Usted se vestirá de blanco, se le enseñará acerca del plan de Dios y
participará en ceremonias sagradas en las que se le prometerán bendiciones a
medida que usted se compromete a seguir las enseñanzas y el ejemplo de
Jesucristo.
Recuerde que todas las cosas en el templo señalan hacia el Salvador y
nos acercan más a Él y a nuestro Padre Celestial. Todo está pensado para que
sea edificante e inspirador.¨*Las ordenanzas del Templo y la senda del Evangelio.
En el libro de Salmos se nos pregunta:
- “¿Quién subirá al monte de Jehová?
- ¿Y quién estará en su lugar santo?
- El limpio de manos y puro de corazón” (Salmo 24:3–4).
El
“monte” de Jehová es Su templo y se mencionan dos requisitos para los que
desean entrar en él: ser limpios de manos y puros de corazón.
Al hablar sobre estos versículos, el élder David A. Bednar dijo: “Permítanme sugerir que las manos
se limpian mediante el proceso de despojarnos del hombre natural y de vencer el
pecado y las malas influencias de nuestra vida por medio de la expiación del
Salvador.
El corazón se purifica al recibir Su poder fortalecedor para hacer el
bien y llegar a ser mejores.
Por tal razón, todos nuestros deseos dignos y buenas obras, aunque son
muy necesarios, no producen manos limpias y un corazón puro.
La expiación de Jesucristo es la que proporciona tanto el poder limpiador y redentor
que nos ayuda a vencer el pecado como el poder santificador y fortalecedor que nos ayuda a ser mejores de lo
que seríamos si dependiésemos solo de nuestra propia fuerza.
La expiación infinita es tanto para el pecador como para el santo que
cada uno de nosotros lleva en su interior” (Limpios
de manos y puros de corazón, Liahona, noviembre de 2007, pág. 82).
Los convenios que se hacen en el santo Templo, son sumamente sagrados y
personales… tienen poder de lo alto.
- 1. Los convenios hacen más profunda su relación con el Padre Celestial y Jesucristo.
Un convenio se define a menudo
como una promesa sagrada entre Dios y Sus hijos. Aunque esta definición es
correcta, no es completa. Un convenio es más que un contrato; es un compromiso
personal que define y hace más profunda nuestra relación con Dios. Los
convenios crean un vínculo sagrado entre Dios y Sus hijos. Renuevan nuestro
espíritu, transforman nuestro corazón y nos ayudan a llegar a ser unidos con
Él. Si se mantiene fiel a sus convenios, su devoción a nuestro Padre Celestial
y a Jesucristo aumentará; sus sentimientos de gratitud se incrementarán; su
capacidad para amar y servir a los demás crecerá y las bendiciones prometidas
en el templo fluirán más abundantemente en su vida diaria.
- 2. Los convenios le ayudan a centrarse en las cosas que más importan.
Durante
toda su vida tendrá que tomar decisiones que requieran de su tiempo, energía y
recursos, y muchas decisiones buenas competirán con otras que valen la pena.
¿Cómo elegir
Por medio de los convenios, Dios
nos ayuda a entender principios, prácticas y promesas que Él considera
importantes. Ciertamente obtenemos una perspectiva más inspirada en cuanto a
las prioridades y tomamos decisiones más sabias cuando nos centramos primero en
esos sagrados compromisos que hemos hecho con Dios.
- 3Las ordenanzas y los convenios del templo le bendicen a usted y a los demás.
Como todas las ordenanzas del
Evangelio, las ordenanzas del templo son algo que primero recibirá usted
específica e individualmente. Esto es particularmente cierto si va a recibir su
investidura o a ser sellado. Tenga en cuenta que, el día que reciba estas
ordenanzas, saldrá del templo con promesas que el Señor le hace directamente a
usted; no promesas hechas a algún profeta o pueblo de la antigüedad, sino
promesas que se le hacen a usted. Debe procurar entenderlas y comprender la
importancia que tienen en su vida.
Después de recibir las ordenanzas
del templo para usted mismo, puede regresar al templo y recibir las ordenanzas
en favor de otras personas. Su servicio bendecirá la vida de esas personas y
también le recordará a usted sus propias promesas y bendiciones.
Desde ya debemos de prepararnos para participar en las ordenanzas del
templo, recuerde que Dios es su Padre
Eterno y que Jesucristo es su Redentor.
Ellos lo conocen personalmente Ellos lo aman por completo.
En todas las cosas del Señor hay promesas, a medida que honre con
exactitud los convenios que ha hecho con Ellos, las sagradas ordenanzas del
templo traerán bendiciones en esta vida y en la venidera.
¿Recuerda alguna ocasión en que se sintió particularmente cerca del
Padre Celestial y Jesucristo? Esos sentimientos crecerán cuando regrese al
templo tan a menudo como le sea posible.
El templo está apartado de las distracciones, las tensiones y las
influencias negativas de la vida. En este santo lugar se le recordará que usted
y sus seres queridos están aquí por un grande y noble propósito. Encontrará
mayor paz, consuelo, guía y esperanza.
Se dará cuenta de que las bendiciones del templo entran en su corazón y
elevan su alma. Si desea seguir a Dios y a Jesucristo, con cada visita
entenderá más cosas acerca de Ellos y de Su amor por usted y por los demás.
Aun después de salir del templo y regresar a su vida cotidiana, el
Espíritu Santo seguirá enseñándole, recordándole lo que experimentó, lo que
sintió y cómo puede vivir como Dios desea que viva.
Al prepararse para entrar en el templo, recuerde que Dios desea que
usted esté cerca de Él, y ha puesto Su templo como un lugar especial para que
se acerque más a Él.
Su gozo eterno es también el gozo de Él, quien nos dio las bendiciones
del templo para guiarnos de regreso a Él.
Pida Su ayuda a medida que se prepara y comparte el trayecto con Él.
Él lo guiará, le inspirará y le ayudará a lo largo del camino.
La historia de los templos
2 Julio 2015
La historia de los templos
- Los templos son casas del Señor. Son lugares donde se llevan a cabo las más altas expresiones de adoración religiosa.
- La idea esencial de un templo es y siempre ha sido la de un lugar especialmente apartado para el servicio considerado sagrado.
- ¿Por qué los mormones construyen templos?
La historia de los templos y la construcción de templos se remontan a la época del Antiguo Testamento. En el desierto de Sinaí, el Señor ordenó a Moisés que construyera un tabernáculo portátil para que el pueblo de Israel pudiera hacer promesas con Dios.
Después que los israelitas se establecieron en la tierra prometida, el Señor les dio instrucciones de que construyeran un templo. El templo del rey Salomón fue destruido por los babilonios en 586 a.C.
El Templo de Salomón fue reconstruido y ampliado por Herodes. Jesucristo pasó un tiempo en el templo de Jerusalén durante Su ministerio terrenal. El templo fue destruido por los romanos en el año 70 d.C.
Después de que José Smith fue llamado por el Señor para restablecer la iglesia cristiana original en 1830, él recibió una revelación que se debía volver a construir templos. El primero de estos templos modernos fue construido en Kirtland, Ohio.
Cuando los mormones se volvieron a establecer en lo que se convirtió en la ciudad de Nauvoo, Illinois, se construyó el segundo templo. Terminado después de la mayoría de los Santos de los Últimos Días ya había salido hacia las Montañas Rocosas, este templo fue destruido por un incendio en 1848.
Dentro de los cuatro primeros días de entrar en el valle del Gran Lago Salado, el presidente Brigham Young anunció la intención de construir un templo. La construcción comenzó en 1853.
Templo de Saint George, Uth |
Los templos en St. George, Logan y Manti fueron los siguientes templos terminados, todos en Utah
Templo de Manti |
Terminado 40 años después de iniciado, el Templo de Lago Salado se convirtió en un símbolo de la Iglesia y sigue siendo el templo más grande con 253,000 pies cuadrados de construcción.
Templo de Lago Salado
|
Un modelo de corte transversal del Templo de Lago Salado se puede ver en el Centro de Visitantes Sur de la Manzana del Templo en la ciudad de Lago Salado.
12. Templo de Laie Hawái
Originalmente llamado el Templo de Hawái, fue el quinto templo construido y el primero fuera de Utah y los Estados Unidos y se terminó en 1919.
13. Templo de Berna Suiza
Dedicado en 1955, el Templo de Berna Suiza, fue el primero construido en Europa.
En 1974, el Templo de Washington D.C., justo al norte de la circunvalación, en Kensington, Maryland, fue dedicado por el Presidente de la Iglesia Spencer W. Kimball.
En 1983, el Templo de Atlanta Georgia se convirtió en el primero de más de 80 templos dedicados por el Presidente de la Iglesia Gordon B. Hinckley. Este templo fue remodelado y vuelto a dedicar en 2011.
El Templo de San Luis era el templo número 50 de la Iglesia, dedicado en 1997.
El Templo de Vernal Utah es único, siendo el primer templo construido en un edificio existente. El exterior del histórico Tabernáculo de Vernal se ha conservado y el edificio se convirtió en un templo.
Una nueva era de construcción de templos más pequeños comenzó con la terminación del Templo de Monticello Utah en 1998, el templo número 53.
El Templo de Vernal Utah es único, siendo el primer templo construido en un edificio existente. El exterior del histórico Tabernáculo de Vernal se ha conservado y el edificio se convirtió en un templo.
Una nueva era de construcción de templos más pequeños comenzó con la terminación del Templo de Monticello Utah en 1998, el templo número 53.
El templo número 75 y uno de los 13 templos que existen ahora en
México, el Templo de Tuxtla Gutiérrez fue inaugurado en marzo de 2000.
Un nuevo templo, diseñado según el original Templo de Nauvoo, Illinois, y construido en el terreno original, se terminó en 2002.
Comentarios
Publicar un comentario